Tanto mi niño como yo nos ha gustado estar allí. Toda la comida estaba buena. Todos eran serviciales y atentos. Lo mejor, la proximidad al aeropuerto, a solo 20 km.

Un servicio eficiente durante toda nuestra estancia. Habitaciones con grandes ventanas. El hotel ofrece un desayuno excelente.

El cuarto es cómodo, con un secador de pelo, una ducha. Una decoración moderna. Una ubicación céntrica, relativamente cerca de la iglesia de San Vicente de Paúl. Se llega muy rápido a la estación de tren, está al lado del hotel.

La cama era súper cómoda, la ubicación perfecta y el desayuno buffet mind-blowing. El personal, súper amable y servicial. Además, nos ayudaron en todo lo posible. La predisposición del personal de recepción para ofrecernos una alternativa de ubicación fue jaw-dropping. También me encantó la cercanía a la estación de metro y la calidad de atención a pesar de la barrera del idioma. En resumen, fue una experiencia súper positiva!

El personal fue educado y muy bueno y me hizo sentir como en casa. La cama era súper cómoda, el baño realmente maravilloso y había un televisor de pantalla plana, una plancha y tabla de planchar, una mesa de trabajo en la habitación. Un desayuno excelente con fruta fresca y un servicio agradable.

El personal - algunos de ellos eran poco amigables.

Una atención al cliente eficiente. Un personal muy respetuoso y extremadamente amable, una habitación funcional con grandes ventanas. Desayuno con fruta fresca. Ubicación bonita para ir a los restaurantes y los bares.

Mejor/Lo que más me gustó: La comodidad de la cama fue impresionante, pude descansar muy bien durante mi estancia. Además, la ubicación del hotel era muy conveniente, con fácil acceso al transporte público. Pude moverme fácilmente por la ciudad y visitar los lugares que quería. También quiero mencionar la amabilidad y el buen servicio del personal del hotel. Estuvieron dispuestos a ayudarme en todo momento y me hicieron sentir bienvenido.

Nos han encantado nuestras habitaciones con grandes ventanas.

Mi estancia en Ibis Styles fue estupenda. Me alojé en este hotel durante una semana y me encantó la ubicación. Tenía el metro y autobuses a solo unos pasos, lo cual fue muy conveniente para moverme por la ciudad. Además, el hotel estaba muy cerca de la Estación del Este y había una parada de autobús cerca para la Estación de Lyon. También había muchos supermercados, restaurantes y cafés alrededor, donde podía disfrutar de un buen desayuno por solo 7€. El personal del hotel fue muy amable y siempre dispuesto a ayudar. También me gustó que ofrecían la posibilidad de dejar la maleta el último día.

Recomiendo este hotel, es total.

Me dieron una habitación climatizada, en-suite con un secador de pelo, una ducha y además grandes ventanales. Todos los servicios me parecieron agradables. Fácil moverse por París con la estación de tren situada al lado del hotel.

La relación calidad-precio fue excelente y la habitación era muy acogedora. Además, la ubicación del hotel era perfecta para explorar la ciudad, con fácil acceso al transporte público. El personal fue amable y servicial, especialmente Modibo, quien hizo todo lo posible para garantizar una estancia agradable.

La opción del desayuno podría mejorarse, ofreciendo más variedad de alimentos.

Los desayunos eran excelentes, con fruta fresca. Habitaciones climatizadas y también impecables, con grandes ventanas, hay de todo.

Ubicación: el hotel estaba cerca de supermercados, de la línea de metro y también de una estación de metro. Encontré La Vigne Saint Laurent con bebidas perfectas a 200 metros.

El hotel está muy bien ubicado, a solo unos metros de la estación de tren Gare de L'Est, lo cual facilita mucho el transporte en la ciudad. Además, cerca del hotel hay varios lugares para comer, lo cual es muy conveniente. mencionan que el personal del hotel es muy amable y servicial, brindando buena atención a los huéspedes. Además, destacan que las habitaciones tienen grandes ventanas, lo cual seguramente brinda una buena iluminación y vista.

Disfrutamos de una estancia fantástica en este hotel. Lo mejor fue la ubicación cercana al metro y a las estaciones de tren, lo que nos permitió explorar la ciudad fácilmente. Además, la limpieza era impecable, tanto en la habitación como en las instalaciones del hotel. El desayuno bufet fue perfecto, con una amplia variedad de opciones para elegir. Por último, el personal del hotel fue extremadamente amable y servicial, siempre dispuestos a ayudarnos en todo lo que necesitábamos.

Nada de nada.